martes, 2 de diciembre de 2008

ENTREVISTA

ESTA ENTREVISTA PERTENECE A UNA SECCIÓN BOLETIN INFORMATIVO ALGARABÍA DE ENERO DEL 2006


Un cafelito con…

Pregunta: ¿Cómo te llamas?
Respuesta: Sebastián Ruiz Benítez.

P: ¿Dónde y cuando naciste?
R: nací en el Águila, que es una Aldeira, un ranchito, que está por el Retín. Nací el 18 de Noviembre de 1923.

P: ¿Dónde y como fue tu niñez?.
R: a los 4 o 5 años me llevaron a Chiclana hasta los 7 años. Fue una niñez mala. Pavos, pavos y más pavos. Y además latigazos que me daba mi abuela. Vivía en Chiclana allí por donde está ahora el tanatorio, por el río. Luego mi madre me trajo otra vez al Águila. Ayudaba a mi padre que era carbonero. Luego me fui con los Romero Romero, en Manzanote de porquero sobre los 10 años y estuve allí mucho tiempo. Nosotros en mi casa éramos nueve. Yo ganaba todos los días dos reales, tres duros al mes. Estuve meses. Yo iba a mi casa cada cuatro días a cambiarme de ropa, y le llevaba pan y lo que podía recoger por el camino. Nosotros teníamos cuatro teleras de kilo y medio para cinco días.

P: ¿a qué jugabais de pequeños?
R: con los zagales “a sacarse novia”, que se hacía tirando uno el porro hacia arriba y otro le tiraba a dar, así si le dabas o no o cuantas veces le dabas, te sacabas novia o no. También jugábamos a saltar arroyos, yo caía siempre en mitad del arroyo, a las peleas,… Yo apenas podía jugar a nada, no tenía tiempo. Estaba todo el tiempo trabajando.

P: ¿Cómo era tu horario de trabajo?.
R: no tenía hora. Cuando me levantaba al amanecer me iba ya con los cochinos. Y todo el día con ellos. Por la noche lo metíamos ya en la cochinera. Parábamos a dormir en la gañanería. Y de cenar, gazpacho caliente, con más agua y pan mojado que otra cosa.


P: ¿cómo era tu entorno?.
R: estaban los gañanes que trabajaban en el campo. En el año 35 y 36 saltó el “movimiento”, saltó la guerra. Era un entorno de trabajo, de estar todos ocupados cada uno en su tarea. Cuando estalló la guerra todo cambió. Yo seguí trabajando en lo mío. Así estuve hasta los 19 años. Yo ya quería otra cosa, me veía yo con ganas de trabajar. Cando yo tenía 20 años, murió mi padre. No fui a hace el servicio gracias a que mi madre objetó lo de viuda, y yo era el más grande de mis hermanos y en este caso yo debía ser el que cuidara de mi casa, y por eso me libre del servicio.
Y seguía trabajando para los Romero Romero, en distintos trabajos, pero en la misma empresa. Me case el 6 de Agosto de 1951 y en el año 52 nació mi hijo Juan y seguí trabajando como pude. En el año 53 me fui a Medina, de guarda con los Bermúdez Aragón. Yo vivía allí en una choza. Estuve allí hasta el 65. de ahí me fui al Ahorcajo hasta el 66, que me vine a Cantarranas. Me fui con Leonardo Mera. Estuve con ellos un año, hasta el 67. luego el treinta de Septiembre (siempre el cambio de plantilla alrededor de San Miguel), me llevó Juan Reyes a colocarme en Las Lomas y estuve allí como fijo hasta 1987 que me jubilaron, aunque de vez en cuando me llamaban por haber tenido buena conducta.

P: ¿tu hermano a que se dedicaba?
R: al campo, a trabajar. La cosa estaba muy mala. Pero cuando peor se pasó fue después de la guerra.

P: ¿cómo te fue en la Guerra Civil?.
R: cuando saltó el movimiento, el 18 de Julio de 1936, se levantaron los piquetes en el campo, lo se izquierda ya que en las últimas elecciones de la República ganaron el frente de izquierdas (durante el 18 y el 19 de Julio). Se levantaron muchos, cada uno con lo que tenía, porros,… el día 20 llegaron a Vejer el movimiento. Querían entrar por la subida de los remedios pero cayeron un árbol para que no entraran, pero un guardia civil avisaron a los moros que venían de África que por la cara de Barbate había otra subida y por allí llegaron. Al primero que dispararon fue a un pobre hombre que era cabrero he iba con sus cabras y dos cántaros de leches, a Pepe López. Ya en Vejer se produjo un tiroteo, se disparaba a todo lo que se moviera. La guardia civil se unió a ellos. El presidente de los socialistas en Vejer era Juan García, que se fue como todo el que pudo, huyendo de que lo cogieran.

P: ¿qué opinas de la guerra?
R: fue mala. Después de la guerra todo iba para sufragar el gasto de los soldados, arrasaban todo lo que tenían por delante; trigo,… Yo seguí trabajando. Yo venía a moler trigo a Cucarrete. Yo tendría unos 16 años y una pareja de civiles que le estaban allí, me llevó a los molinos y me dijeron que fuera al día siguiente a por ellos; todo era una mentira para quedarse ellos con la harina. Como esto, con todo. La gente escondía el trigo por donde fuera para que no se lo confiscaran, entre las alpacas de los pajares,… en fin; donde fuera.

P: ¿tenías miedo a la guerra?.
R: ¡¡no le voy a tener!!. Claro que le tenía. Yo tenía unos 14 años cuando estalló. En el 38 yo trabajaba en Patría, y de noche escuchaba a la gente lamentándose cuando lo fusilaban. En La Muela, en el pinar de Chiclana y en Patría fusilaban a la gente.

P:¿viviste los Sucesos de Casas Viejas?
R: yo tenía 10 años, se fueron mucha gente de allí, había miedo. Los guardias de asalto la armaron allí. El movimiento de Casas Viejas ocurrió debido a que no se enteraron que la huelga que se había convocado se anuló. Yo no se mucho del tema. Al parecer el movimiento fue un fracaso y quemaron la casa de Seisdeos la guardia de asalto, La Libertaria se escapó y todo eso. La gente habla mucho de este tema pero hay cosas que no se dice, hay muchas cosas que se dicen solo para la conveniencia de cada uno.

P: ¿Cuándo te viviste a Cantarranas?
R: me vine en el 66, el 25 de Septiembre. Me coloqué en Las Lomas a trabajar y me quedé aquí viviendo. Me hizo la casa Agustín Ruiz, un hombre le Los Badalejos.

P: ¿cómo veías tú a tu generación, a tú quinta?.
R: mala. Yo bregaba mucho con los pavos y eso. Yo estaba medio bien, teníamos que trabajar mucho y disfrutábamos el poco tiempo que teníamos. Y cuando me iba para mi casa recogía por el camino lo que podía; le llevaba pan a mi madre, si me encontraba alguna tagarnina la cogía,… en fin, que había que buscarse la vida.

P: ¿La escuela ni verla no?.
R: yo lo poquito que se, me lo enseñó mi padre, que de cuentas y eso sabía algo. Ya cuando yo era más grande me enseñó algo más Camacho.

P:¿cómo eran los que mandaban?
R: siempre ha mandado la derecha. Yo he sido un esclavo de los señoritos. No tenía ni noches ni días.

P: ¿qué opinas del franquismo?.
R: malo. Franquito solo fue bueno con los señoritos, como con Las Lomas, los Terry, Cucarella,…

P: ¿y la II República?
R: yo no la conocí, era yo muy pequeño, no me acuerdo. Yo se que cuando gano las elecciones el Frente Popular, cuando ganó la izquierda las cosas para nosotros los trabajadores se pusieron algo mejor. Mi madre me decía que Primo de Rivera lo hizo bien, que la cosa mejoró.

P:¿cómo ves hoy a los jóvenes?
R: viviendo como teníamos que haber vivido nosotros. La España de nosotros ha sido de abusos. Los señoritos se encontraban con un poderío y con eso nos abusaba. El que se repuchaba un poquitos lo despachaban y a vivir de la limosna. Nosotros éramos esclavos.
Nosotros no hemos vivido nuestra edad de jóvenes como verdaderos jóvenes. Mis ideas de cuando yo era joven, era la de ganar lo que fuera para llevarlo a mi casa a mi madre. Yo solo trabajaba, yo rendía para que me pagaran. Y ahora es la cosa más o menos igual. Hay más dinero, pero de igual forma hay que conseguirlo, trabajando, al menos los que son honrados. Se consigue dinero más fácil o más cantidad, es decir, se consiguen 5 duros, pero se te van 20 y no sabes en que, se gasta mucho, vuela de las manos. Pero hoy casi todo el mundo tiene algo en los bolsillos.

P:¿crees que el joven tiene demasiada libertad?.
R: por un lado si. No se respeta las leyes. Abusan de la democracia, y que se eche afuera el que pueda, a veces yo mismo me paso de la linde.

P: entonces, ¿crees que tendría que haber más disciplina?.
R: la hay, pero no la cogen. No hay respeto a nadie ni a nada. El pasotismo de los niñatos, eso no debería de haberlo. Yo no se lo que es la droga. Se creen que por fumarse un porro ya son los reyes del mundo. Pero pasa lo mismo son los grandes que con los chicos.

P: ¿qué habrías cambiado de tu juventud?
R: yo, ser feliz. Lo es ser feliz, nunca lo he sido. Yo me casé y estuve un año en Vejer. Yo estaba en el campo cuando nació mi hijo Juan y entonces me tuve que tomar la cosa más en serio. Siempre he estado bregando. Habría cambiado algunas cosas y otras no. Pero no he sido feliz. Siempre he tenido que arrastrar la barriga.

P: ¿los jóvenes aprovechan el tiempo hoy día?.
R: lo están aprovechando demasiado. Algunos miran para su familia y la ayudan, y otros solo miran para ellos, abusan de su casa o pasan de ellas. Hay algunos que no quieren dar un palo al agua y estar arrascándose la barriga mientras le ponen las cosas por delante. Algunos no quieren estudiar, les gustan pasar el tiempo en el sofá. Lo normal es que estudien, hoy para colocarse es necesario para colocarse donde sea. Yo aconsejo que se aprenda. Yo aun no le temo al trabajo, lo que puedo y lo que se lo hago. Pero se que tengo una edad y tengo que limitarme.

P: ¿crees que algún joven tendría que haber vivido en tu tiempo?.
R: hombre… pero yo no le digo a nadie lo que tiene que hacer. Yo tengo mi idea y no quiero que nadie me la quite.

P: ¿ha progresado la juventud?
R: en algunos casos si y en otros no. Viven mejor. Yo no tenía ni una bicicleta y hoy el que menos tiene es una moto. Las cosas han cambiado. Antes, ni los señoritos tenían coche, y ahora cualquiera tiene dos coche. No me importa pasar lo que he pasado si lo que he hecho ayuda a que todo progresa.

P: ¿ahora se está mejor que antes?.
R: por supuesto. Hace 30 años los mayores no cobraban nada. Estaban pendientes de los hijos, de lo que estos le llevaban a sus casas. Hoy día se cobra al menos la pensión.

P: ¿sabes lo que es Internet?
R: yo no. Si me lo dices, lo sabré.

P: ¿con las nuevas tecnologías como te llevas?.
R: yo no me llevo muy bien. Yo soy un atrasado para esas cosas.

P: ¿en tu juventud que era una novedad?.
R: cuando se había muerto alguien en tal sitio y se conocía, cuando se iba a cualquier sitio que nunca había ido,… eso era novedad.

P: ¿te interesa lo nuevo, las nuevas tecnología por ejemplo?.
R: los ordenadores ya para mí, no les veo punta, la verdad. Yo lo veo muy bien que aprendan todo esto, yo ya no puedo aprender ni aunque me enseñasen las letras una a una.

P: ¿crees que la vida te debe algo?.
R: si, mucho. Yo he pasado mucha fatiga que no tendría que haber pasado. Yo he vivido a mi manera. He respetado a todos, he recibido consejos y los he dado; a veces me he equivocado en mis decisiones. Pero he vivido como he podido, pero respetando.

P: ¿volverías a ser joven?.
R: ¡¡hombre!!, y lo pasado, pasado está. Yo, mis 82 años los cambiaría por 18 o 20 años; pero viviendo como se vive ahora. Mi juventud no fue muy buena. Pero yo nunca le he tenido miedo a nada.

No hay comentarios: