martes, 21 de junio de 2011

MARATHÓN FÚTBOL SALA CANTARRANAS 2011


SÁBADO 25 DE JUNIO



CUADRANTE




Octavos de Final
10:00 Zenit & La Barriada a

10:50 Tintefish & Malabrigo b



11:40 Bastinzao Picha & Mira Quien Juega c



12:30 La Resaca & Martillazo d



13:20 Los Poyatos & Huerto Becerra e



14:10 Los Badalejos & Aston Birra f






DESCANSO Y ALMUERZO









17:00 Barrio Vikingo & Los Dávilas g




17:50 Autoescuela & Varelo
h

Cuartos de Final
18:40 a & b 1





19:20 c & d 2





20:00 e & f 3





20:40 g & h 4





Semifinales
21:30 1 & 2
22:10 3 & 4
23:00 Infantiles






Final
00:00












POZOS


En zonas rurales el agua es fundamental. Es necesaria para el uso personal, para los cultivos y para los aminales. Hay distintas maneras de conseguirla; por medio de la lluvia directamente, por la que vemos en superficie (ríos, arroyos, lagunas,…) o bien realizando un pozo en busca de ella. Esta entrada versará sobre esta última opción.


En Cantarranas como en todos los pueblos la realización de pozos a mano se ha venido dando hasta hace muy poco. Con la construcción de los denominados pozos de fondeo y la instalación de una red de agua potable para los vecinos la cuestión de los pozos privados se ha quedado ahora como un histórico recuerdo que casi pasa desapercibido en nuestros días.

Cuando se trataba de un pozo en zona privada (en la casa de cada uno se entiende), era el mismo propietario junto con algún amigo quien lo realizaba. Pero cuando se trataba de un pozo en tierra baldía, era otra cosa. Se reunían los vecinos y se convenía entre ellos hacerlo público. La construcción corría por parte de ellos. Esta ejecución tenía como objetivo el abastecer de agua al ganado que tenían. Algunos también servían para uso personal, pues había mucha gente que no lo tenían en sus parcelas y venían a los públicos con cántaros a por agua.


Los pozos públicos eran muy necesarios. Podía extraer agua del mismo quien quisiera, ahora bien, había que respetarse los turnos. Los que tenía primeros derechos de extracción de agua eran quienes lo habían construido y una vez el ganado de estos bebían, podían beber los demás siempre guardando el orden de llegada.


Otra cuestión era el sitio donde hacerlo. Había personas que decían saber donde era el lugar más propicio para excavar, pues según parece con una cadenita iban a buscar las betas de agua. Muchas veces como cuentan los vecinos mayores, se excavaba y “solo se encontraba grea”, que era una tierra indicadora de que ahí no había agua. Por el contrario, un buen indicador de la existencia de agua en un lugar era la presencia de juncos. Cuando se realizaba un pozo y no se encontraba agua, se volvía a rellenar con la misma tierra sacada y a buscar a otra parte.


A la hora de meter mano, según la cantidad de gente que lo realizaba se tardaba más o menos. Se utilizaba una zoleta y una pala, es decir, a mano. Cuando ya no se alcanzaba a sacar tierra con la pala hacia el exterior, se colocaban tres palos y una polea para sacar la tierra del interior por medio de una espuerta de palma o esparto.


Si se encontraba agua a un metro o dos se colocaba una especie de encofrado con tablas llamadas “marranas” para aguantar las paredes del anillo realizado para que no se derrumbaran. Muchas veces una vez terminada la profundidad del pozo, si era muy difícil sacar dichas tablas, se dejaban dentro.


Normalmente se baja cuatro o cinco metros. En algunos pozos, según parecía o se tenía, se colocaban “camas de carreta” (las maderas que llevan las ruedas de las carretas) alrededor del anillo del pozo. Estas maderas, en el cieno del fondo, no se pudren. Luego, a partir de estas maderas se iba construyendo hacia arriba un emparedado de piedras. Según la zona se colocaban piedras de campiña (jabalunas) o de cantera (piedra de grano). Estas se iban colocando más o menos bien distribuidas y se le añadía un poco de cal (“una de cal y dos de arena”).


Cuando se llegaba a ras de suelo, se dejaba ya a ese nivel el emparedado de piedras. Ya solo se colocaba alrededor del anillo del pozo exterior una especie de alambrada para prevenir caídas, que por otra parte eran podría decirse que frecuentes. Fue más tarde cuando se levantaban paredes al anillo del pozo. Claro está, se le ponían unos bueno maderos y una garrucha para sacar el agua del mismo. E incluso sin carrucha se sacaba agua, directamente con el cubo en algún pozo según cuentan, debido a la abundancia de agua que existía.

Una pieza importante en el acabado del pozo era la “piedra de batiero”. Era una buena piedra que se colocaba donde la persona iba a sacar agua. Hoy día se puede apreciar si vamos a un pozo antiguo como esta piedra está realmente pulida o gastada por la cantidad de personas que han sacado agua del mismo pozo.


Cuando se hacía para ganado (casi todos los públicos) se realizaba un pilar. Este constaba de varios niveles para permitir la facilidad a los animales al beber. Desde un nivel superior donde los caballos bebían hasta uno más inferior donde eran las crías de bestias o becerros quienes se colocaban. Ahora bien, en la parte más pegada al pozo (solo había una separación de un metro escaso) debía de construirse una especie de pileta para regular el agua que caía al pilar y así la onda u ola que se hacía la regar el cubo en el pilar no rebosara por la otra punta del mismo.


Incluso había especialistas en la realización de pozos. En Vejer estaba Antonio Ponce. Este tenía su trabajo en el campo como otros, pero le salía chapuces en la fabricación de pozos. El señalaba el sitio donde hacerlo y se llevaba una cuadrilla o con la gente misma de la finca o la parcela lo hacía. En Casas Viejas estaban Los Navas el cual realizó por la parte de Nájera muchos pozos.


En Cantarranas, allá por el ´46, en el año que Berná tomó la Heza, había un par de pozos públicos, el “pozo de los Meras”, alrededor del cual se hacía un gran charco que duraba casi todo el año y con el que mucha gente con un dornajo de madera (pileta que se le ponía al ganado cuando no existían comederos cerca) y lo utilizaban en modo de barca para pasearse por el charco. El otro pozo y quizás el más importante de los presentes en Cantarranas era el Pozo del Llano. Hoy día sigue en tierra baldía no como el anterior. Seguramente fue realizado por Tomás Camacho y “los Bizcos”, Ramón y Antonio Rodríguez. Ya que estos dos tenían las primeras aguas que se sacaban.


Habían otros pozos como el de la Loma, pero estaban ya dentro de fincas privadas. En Cantarranas o también llamada Cabrahigo popularmente por la época, existía un manantial muy rico en agua llamada “la Fuente de Cabrahigo” debido sencillamente a que arriba de una piedra que estaba en el manantial, brotaba un cabrahigo. A esta venían los vecinos de alrededor (actual gasolinera, pista de futbito,...) en este lugar no hacía falta guardar cada cual su turno debido a que era un manantial. Con el tiempo y con las construcciones de pozos privados en las casas y un gran pozo de fondeo realizado por Las Lomas cerca de la fuente, esta se ha perdido.


A los pozos siempre se arrimaban mucha gente, servía de zona de esparcimiento también, de trata de ganado mientras se esperaba turno,…. Cada vaquero se traía su cubo de lata y su cintero de esparto. Casi todos los pozos que tenían mucho uso durante el día, se guardaba un bote con un poco de aceite para engrasar bien siempre la polea.


Cuentan los mayores que podían juntarse cabezas y cabezas de ganado esperando beber y aún más cuando en los ´50 vinieron repetidos años de sequía. Con tanto ganado y gente junta siempre, como hemos dicho, se hacían tratos pero también había riñas entre vaqueros pues el tiempo en aquel tiempo como en este aunque de distinta forma primaba. Así, como por ejemplo en el Pozo del Llano, desde que salía el sol hasta la caída del mismo, la polea no parada de funcionar.


Sin duda era otra época. Ahora apenas se mueve el ganado en busca de agua o de comida. Existen buenas cisternas para llevar agua al ganado y el cántaro se rompió de tanto ir a la fuente por agua para el uso doméstico. No sabemos apreciar los grifos.



Foto cedida de Salus. Se aprecia el pozo como fundamental para la vida alrededor de unas chozas o caserones.





Pozo en el patio de "los Cagé"Interior de un pozo "más moderdo", pues está recubierto de ladrillos


Pozo de Algar (situado a pies de la cuesta hacia el "Peñón Rodao"). Otro pozo situado en un descansadero de ganado.




Manolo Domínguez "el mecánico" con el Pozo del Llano de fondo. Hace más de 40 años.



Pozo del Llano hace pocos años en otoño. se puede apreciar lo elevado de la estructura así como se intuye el llano utilizado como descansadero de ganado.




Pozo del LLano. Se puede apreciar los niveles del pilar para el tamaño del ganado y el empedrado alrededor del mismo para no formar fango y tener un suelo firme.



Foto cedida por Salus. Se aprecia la forma de vertir agua así como la "piedra del batiero" a los pies de la mujer desde donde saca agua para la bestia.



lunes, 13 de junio de 2011

CONCIERTO EN CANTARRANAS; EN "VENTA LA TARRAYA"




En la terraza veraniega de Venta la Tarraya este viernes 17 de junio a partir de las 23:00 horas, tendrá lugar el concierto de Abraham Sevilla.


EXCURSIÓN A BAHÍA PARK ALGECIRAS










LA ARQUITECTURA DEL HUERTO



Quién dice que en el huerto solo se firma con la "zoleta". Hay ingeniería en los canteros, como podemos ver en estas tomateras de caña. La estructura que forma ayuda a las tomateras a trepar literalmente y a estar bien afianzada sobre ella.


Hay varios tipo de tomateras, otro es el de rama o baja. A la cual no hace falta ponerle ningún apoyo pues no crecen en exceso y no se tronchan. Una u otra clase de tomates, pero todos del huerto, con lo que para el paladar significa.